Nuevo capítulo de la serie de podcasts 'Braille: 200 años abriendo puertas': El braille y el ocio
Llegamos a los capítulos finales del podcast “Braile:200 años abriendo puertas”, una serie en la que, junto a nuestros promotores braille, estamos viendo todos los detalles del braille y todo lo que este sistema de lectoescritura ofrece a las personas ciegas y con discapacidad visual cada día.
En esta ocasión hablamos con Jordi Cardús, el promotor braille en Catalunya sobre el braille y el ocio, un tema muy amplio pues, en palabras de Jordi, “el ocio, lo bueno que tiene es que es tan transversal, es cultura, es juego, es intergeneracional… tiene mucho que ofrecer” y el braille, también.
Para Jordi, cualquier momento es bueno para aprender braille, porque el aprender no tiene edad. Haciendo referencia a al famoso refrán de “el saber no ocupa lugar”, Jordi nos cuenta en este capítulo como el aprendizaje del braille puede comenzar por algo tan sencillo como jugar a las cartas, y acabar convirtiéndose en un compañero de vida, despertando ese sentimiento de querer aprender más y más.
En este podcast Jordi nos cuenta como el ocio y el braille están muy unidos, tanto es así que, para enseñarlo, él intenta que sus clases sean dinámicas y lúdicas. “Intento siempre aplicar el ocio en la base, en el aprendizaje. Cuando estamos aprendiendo ya intento colar juegos para que vean el braille, no solo como una herramienta, sino como algo divertido”, asegura, además, intenta acercar el braille de una forma amigable, conociendo a sus alumnos y “jugando con lo que les motiva, les gusta y les mueve para poder aplicar el juego”.
A pesar de lo que podemos pensar, que el ocio y el braille se queda en los juegos de mesa, va mucho más allá, pues como asegura Jordi, “el ocio puede ser ir a un museo y que haya un mapa en relieve o que te den una carta en braille en un restaurante…”. Por eso, también hablamos en este capítulo de cómo el braille se puede convertir en una herramienta contra la Soledad No Deseada.