Navidades inclusivas: Nos ves así, somos así.
Las fiestas navideñas son sinónimo de ciudades decoradas, iluminaciones espectaculares y reencuentros que esperamos todo el año.
En esta época, en la que todo invita a compartir y disfrutar es cuando más sentido tiene hablar de Navidad e inclusión.
Una Navidad inclusiva no es un concepto abstracto. Es una forma de hacer que todas las personas, con independencia de sus capacidades, circunstancias o necesidades, puedan participar y disfrutar de estos días.
Pero ¿cómo hacer para que nadie se quede fuera de la celebración? ¿por dónde empezar?
La inclusión empieza en casa… y también en nuestras reuniones
Las Navidades son familia, amistades, mesas grandes y conversaciones largas. Para muchas personas esto es fuente de alegría; para otras, de ansiedad o de barreras invisibles.
Una Navidad inclusiva puede empezar así:
- Hablar de forma clara y pausada, pensando en quienes tienen alguna dificultad de procesamiento o de audición.
- Describir lo que ocurre si hay entre nosotros personas ciegas o con baja visión: quién entra, qué se sirve, con qué se brinda.
- Evitar ruidos excesivos y espacios saturados, especialmente para personas con autismo o sensibilidad sensorial.
- Preguntar, sin miedo, qué necesita cada persona para sentirse cómoda.
Estos gestos pueden hacer que todos disfrutemos de la celebración.
Espacios accesibles también en Navidad
Casas, restaurantes, calles y empresas, son lugares que cambian de aspecto en estos días. Y por eso la accesibilidad es clave para que nadie tenga que “adaptarse a la fiesta”, sino que la fiesta se adapte a todas las personas.
No está de más recordar algunos consejos que harán que las personas con discapacidad disfruten a tope la magia de la Navidad.
- Prepara entradas accesibles para las personas con movilidad reducida,donde vayas a celebrar el evento navideño.
- Cuida la iluminación, las personas con baja visión te lo agradecerán.
- En estos eventos multitudinarios como fiestas de Nochevieja, cabalgatas de Reyes o mercadillos navideños es importante que haya una señalización clara y comprensible.
- Y, por supuesto, por qué no pensar en atracciones adaptadas, las ciudades se llenan de pistas de hielo y otros espacios con actividades lúdicas donde todos deberíamos de poder disfrutar.
Fiestas escolares que integran a todo el alumnado
La web del Concurso Escolar ONCE comparte un mensaje precioso: las Navidades pueden ser un escenario perfecto para aprender inclusión desde pequeños. Y es cierto.
En los colegios, cada villancico o actividad puede ser una oportunidad para mirar más allá del guión tradicional:
- Adaptar letras o ritmos para que todo el alumnado pueda participar.
- Permitir formas diversas de expresarse: cantar, signar, recitar, tocar un instrumento o mover el cuerpo.
- Preparar decoraciones con pictogramas, braille o lectura fácil.
La Navidad puede enseñar que nadie sobra, que todas las maneras de participar son valiosas.
Empresas que celebran pensando en sus equipos
Las cenas de empresa, los mensajes institucionales o los reencuentros corporativos son momentos perfectos para mostrar compromiso con la inclusión.
Una empresa que celebra de forma accesible transmite algo esencial: hay un lugar para ti aquí.
¿Cómo pueden hacerlo?
- Garantizando que los eventos sean físicamente accesibles.
- Facilitando comunicación accesible: subtítulos en vídeos, intérpretes de lengua de signos, documentos accesibles.
- Teniendo en cuenta los tiempos, ritmos y necesidades de cada persona.
- Impulsando regalos corporativos de empresas con propósito social, como las del Grupo Social ONCE.
Celebrar desde la inclusión fortalece los equipos y envía un mensaje coherente con la cultura empresarial.
Regalos pensados para todos
La ilusión de regalar también puede ser inclusiva. En estas fechas hay una oportunidad perfecta para elegir objetos, experiencias o servicios que contribuyan a una sociedad más accesible y diversa.
Algunas ideas:
- Libros en lectura fácil para personas con dificultades cognitivas.
- Juegos accesibles o con diseño universal.
- Experiencias culturales con accesibilidad: obras con audiodescripción, visitas guiadas inclusivas, museos adaptados.
- Productos y servicios de empresas sociales, como los del Grupo Social ONCE e ILUNION, que generan empleo para personas con discapacidad.
Regalar inclusión es igual a regalar oportunidades para todos.
En Grupo Social ONCE decimos que incluir es el mejor regalo que podemos hacer. Y estas fechas nos recuerdan algo fundamental: cuando todas las personas participan, la Navidad se vuelve más humana, más luminosa y más nuestra.





